Inspectores de justicia supervisaron en la mañana del lunes, con presencia policial el desalojo pacífico de una antigua vivienda del B° 26 de Junio.
La casa estaba ocupada por una pareja de jóvenes y su pequeño hijo.
De acuerdo datos recabados en el lugar, la casa que fue construida para el personal de YPF venía siendo ocupada desde hace más de 20 años por diferentes grupos de personas, luego de que su propietario, de apellido Chinchilla, se alejara de la ciudad por razones de trabajo y la dejara al cuidado de una mujer.
A su vez ésta la facilitó más tarde a otro vecino, Javier Quintana, y al fallecer el mismo quedó hace dos años en poder de su hijo Héctor Quintana (21), quien formó pareja con Natalia Castillo (21).
En tanto, desde hace varios años el hijo de Chinchilla inició acciones legales para recuperarla, quedando el caso en manos del abogado particular Ismael Machuca, hasta que un juzgado civil dio expresas directivas para proceder al desalojo.
Los jóvenes que la venían ocupando argumentaron que no eran usurpadores ya que por mucho tiempo nadie reclamó la propiedad y ellos se hicieron cargo de pagar los servicios, pero igualmente acataban la disposición judicial para evitar incurrir en algún delito.
Por tal motivo, el fin de semana ya habían retirado los pocos muebles que tenían y ayer un tanque de agua y otros materiales que le pertenecían, pero solicitaron públicamente a las autoridades municipales que les otorgaran un terreno para poder construir una vivienda propia.
Fuente: La Vanguardia